lunes, 15 de noviembre de 2010

¡Shakira es una grosa!

O era una grosa; o mejor dicho, estaba grosa. Seguramente, le pasó lo que a muchas de nosotras después de un par de semanas de descontrol gastronómico y bebilístico (para ser un neologismo, suena bastante mal): no le entraron los jeans.
O le entraron, pero con fórceps, o le calzaron más o menos bien hasta que se los abrochó y le produjeron una hernia femoral estrangulada.
Lo que sea, es innegable que, conocedora del alma femenina, la colombiana le dedicó una canción a la peor de nuestras pesadillas: el sobrepeso. Y evidentemente, al igual que muchas de nosotras, estaría con unos kilitos de más, producto de las fiestas de fin de año y cuando estaba tirada en la cama, conteniendo la respiración y rezando para que le suba el cierre, le surgió el numen que originó una de sus obras más contundentes: "Las caderas no mienten".

Y lamentablemente, no mienten. Dan fe las perchas abarrotadas de pantalones que no nos entran pero que siguen ahí, expectantes, con la esperanza de que los volvamos a sacar alguna vez del placard. Ingenuos.
De vez en cuando se nos da por mirarlos y pensar en las épocas doradas en las que no teníamos que untarnos las piernas con cremas, aceites y/o vaselinas para que se encaramaran más allá de la rodilla; cuando sólo era cuestión de manotear lo primero que encontráramos y calzárnoslo con la certeza de que estábamos regias y salir al mundo, espléndidas y despreocupadas. Es ahí cuando nos agarra la angustia oral y le entramos al chocolate, pero con un propósito puramente terapéutico, ya que su componente xántico favorece nuestro alicaído sistema nervioso (¡hombres, instrúyanse antes de criticar!). Ingresamos entonces en un círculo vicioso y relleno con almendras.
Alguno que otro dirá que no tiene nada que ver lo que dice la letra con esta hipótesis. Error. Las que estamos adentradas en el tema -de variaciones en la balanza- sabemos que guarda un mensaje críptico, como el "Código Da Vinci".
Si no lo creen, lean la letra al revés, luego tradúzcanla al arameo antiguo, transcríbanla a la simbología Nsibidi y finalmente conviértanla al sistema binario. Parece difícil, pero si lo piensan un poco, no lo es tanto como tener la constancia de trotar una hora todos los días para volver a usar los benditos jeans.
Ahora bien, dicen los entendidos que cuando las cosas están en desuso después de un tiempo prudencial, -diríamos, no más de 1 año- hay que deshacerse de ellas (atención que esto no está contemplado en el código civil como causal de divorcio). 
Y la verdad es que tal vez con ejercicio se nos achate en algo la panza y se reduzca mínimamente nuestra silueta, pero aquí surge un problema: es un poquitín utópico creer que, salvo por prescripción médica, las que no estamos acostumbradas a hacer más gimnasia que caminar rumbo al quiosco nos vayamos a someter a sesiones de gym, pilates y aerobic por tiempo indeterminado.
Será mejor cuidarnos un poco como para que no nos empujen por el traste de a tres para subir al colectivo, y aceptar nuestras redondeces que, parece, llegaron para quedarse.
Por todo esto es que tendremos que deshacernos de lo que no usaremos más, ya que vamos a necesitar adónde colgar ropa nueva que realce nuestra figura de guitarrón. No tanto como un acto liberador, sino porque las perchas buenas cuestan una fortuna.



7 comentarios:

  1. ¡GENIAL PRIMA!!!ES UN ORGULLO TENER A UNA PRIMA TAN CULTA Y LO MEJOR ES QUE ME HACE "REIR"TE MANDO BESOS Y QUE TENGAS MUCHA SUERTE.DESDE LA MADRE PATRIA: NORA

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  2. Gracias prima me alegro que te haya gustado! Y muy bueno lo de "culta" jajajaj! Besos a todos por allá

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  3. Jajajajajaj!!! Albi me hiciste reir,como la deformaron a la pobre en esa foto... UNA GROSSSA!!! pero ni en pedo me deshago de mi guardaropas, paso a contarte que el otro dia me probe para Halloween un palazo negro con flores rojas y una tolerita transparente de esas anudadas adelante, me puse una vincha ancha, plataformas y anteojos de sol (Un buen disfraz de los 80 me quedó).... Ni tiempo tuve de leer tus otras publicaciones, seguro geniales como todo lo que escribís. Flaca, te felicito y te mando un abrazo!

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  4. Ale, vos podés alardear porque te entran las prendas de años atrás. En mi caso, un palazo de los ´80 me subiría, con todo el optimismo del mundo, hasta el codo, jajajaj! Un besote

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  5. Genialllll
    Jajajajajjaa!!!
    Alba tiene razón tu prima..."culta y divertida"
    No dejes de escribir
    que sería de nosotras...
    Palazo Ale??
    y tolerita transparente
    liberada total..!!
    las quieroooooooooo!!!!!!!

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  6. Sigue estando fuertisima la CHAQUIRA , lo que pasa es que las mujeres le tienen envidia y dicen que esta gorda . Yo me la comería sin sal.

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  7. Qué va a estar gorda tu Chakira!! Sólo fue el desliz de las fiestas. Y, sí: somos envidiosas, qué le vamos a hacer! Y haces muy bien en comértela sin sal; evitarás problemas de presión y de retención de líquidos. Saludos!

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